CALORÍMETROS o REPARTIDORES DE COSTES
Los repartidores de costes o calorímetros, Figura 1, son dispositivos que se utilizan para repartir los costes de calefacción de forma individual en un edificio con calefacción central por columnas.
Los repartidores de costes o calorímetros, Figura 1, son dispositivos que se utilizan para repartir los costes de calefacción de forma individual en un edificio con calefacción central por columnas.
Los repartidores de costes de calefacción miden el consumo individualizado de cada radiador. Se instalan en cada uno de los radiadores de la vivienda, siguiendo unas estrictas normas de montaje, todo ello recogido en la norma UNE EN 834.
Se trata de dispositivos que miden dos temperaturas: la de la superficie del mismo y la temperatura ambiente de la habitación, calculando el consumo con estos dos datos, y en base a las características y tamaño del radiador.
En la pantalla se puede visualizar el valor de consumo de cada radiador:
Características:
Actualmente, muchos usuarios de calefacción no pueden instalar contadores para medir el consumo de su vivienda debido a la tipología de las instalaciones.
En estos casos el gasto de calefacción de todos los vecinos es asumido por cada usuario mediante cuotas iguales o coeficientes de participación.
Con Repartidores de Costes y Válvulas con Cabezal Termostático, cada usuario:
Cada radiador dispone de una válvula termostatizable, necesaria para regular el caudal de agua en el mismo y garantizar su correcto funcionamiento. Dicha válvula podrá contar con un cabezal termostático o con un cabezal manual, Figura 3.
Las válvulas de las dependencias principales de cada vivienda (salón, sala de estar y dormitorios) disponen de cabezal termostático, que permite controlar el confort de las mismas.
El cabezal termostático, dispone de una escala graduada de 1 hasta 5 y cada uno corresponde a un nivel de Confort deseado por el usuario.
Detentor (opcional pero recomendable):
Válvula que regula la salida del agua del radiador. Se utilizan en instalaciones de calefacción para cerrar el flujo de agua al radiador durante trabajos de mantenimiento, obras o sustitución, actuaciones que sin el detentor requieren el vaciado y llenado de la instalación, conllevando pérdidas importantes de agua y el necesario acuerdo con toda la comunidad.
La principal ventaja del detentor es que permite independizar los radiadores del resto de la instalación central ante cualquier incidencia, evitando molestias y costes innecesarios.